martes, 13 de junio de 2017

HISTORIAS PATRIOTICAS

Desde otro punto de vista

La señora Monica Gimenez, viuda de Roberto Reducindo (ex combatiente de la guerra de Malvinas, que en consecuencia fue a parar a la marina), recordó a su marido con gran amor y muy emocionada.



¿Su marido era el único que salió de Tres Arroyos para el crucero ARA?

De acá, si era el único que le toco la marina. Después fueron otros de acá, pero para otras partes.

¿Fue por voluntad propia a la guerra?

No, fue cuando tenía 18 años, que le tocaba ir porque estaba el servicio militar obligatorio.

¿De dónde se fijó la zarpada del crucero?

Se fijó desde flota de mar (Punta Alta), pero a él lo tuvieron que llevar en avión hasta Ushuaia, porque cuando lo vinieron a buscar, ya habían partido.

¿Cuántos tripulantes había en el crucero ARA?

Había 1093 tripulantes, a los cuales 323 fallecieron cuando se hundió el crucero. Porque no se animaron a saltar a las balsas salvavidas, o saltaban y morían, o porque el crucero los llevo a hundirse con él.

¿Cómo fue que se hundió el crucero?

Amenazaban los aviones enemigos, y el submarino conquenor, que estaba oculto, bombardeo al crucero, hasta hacerlo hundir.

¿Cuánto tardo en hundirse? ¿Y cuantas balsas había?

a las 16 hs, el submarino lo bombardeo, y a las 17 hs lo único que se llega a ver es la proa. En el crucero había 72 balsas salvavidas, que solo 62 se necesitaban, el resto estaba para reserva. Entraban 22 personas en cada balsa, pero se subían hasta 32.

¿Su marido falleció por el hundimiento del crucero ARA “General Belgrano”?

No, él volvió de la guerra, y acá no le daban importancia porque perdieron la guerra. Falleció años después (a los 29 años), por cáncer en los pulmones, en la cabeza y en otras partes del cuerpo.

¿Cuánto tiempo tuvieron que esperar para que fueran rescatados?

El 2 de mayo se hundió el crucero, y al cuarto día del suceso, se rescató a la última balsa, el aviso ARA Francisco de Gurruchaga, recogió 72hs después del hecho a 362 tripulantes, que unos de ellos era mi marido. Él tenía principio de congelamiento en las piernas, me decía que se orinaban encima para sentir calor, además de tomársela, y se tapaban con los cuerpos de los compañeros que ya se habían muerto.

¿Él te contaba después como la paso en la guerra?

Mucho no quería contar, porque se emocionaba mucho, pero decía que pasaban mucho frio, que no les llegaba nada de los que mandaban de acá. Que no la pasaban bien, pero que volvería a ir, por la patria.

Hay una agrupación hace años ¿Cómo se llama?

La agrupación se llama “Roberto Reducindo” en honor a mí marido, y ahora están por hacer una placita, y estábamos viendo si se le podía poner el nombre de él, ya que siempre fue del barrio, y es una forma más de recordarlo.

¿Cómo surgió la agrupación?

Estaba de intendente Aprile en ese momento, vino hasta mi casa y me dice si yo permitía hacer una agrupación con los otros combatientes, que, hablando entre ellos, por una forma de recordarlo que lleve el nombre de mi marido.

¿Qué siente cuando va a los actos?

Se siente mucha emoción, además él me pidió a mí que vaya, porque siempre iba a los actos, y me dijo que “no dejes de ir a los actos, anda por mí, porque yo no voy a poder estar”. Entonces cada vez que se hace yo voy, porque sé que era muy importante para Roberto, y siempre me decía “si tengo que volver a pelear por la patria, voy a ir”.



¡Viva la patria! - ¡Viva el Belgrano!

Fueron las voces que se escucharon en ese instante en muchas balsas.
Aquí no había público a quien conmover.
Solo estaban los protagonistas, un mar casi helado y
un viento de temporal cuya virtud fue
transportar esos gritos de amor.


La nobleza en la vida de este gran buque, también estuvo ahora presente.
Espero que se completara el abandono y
cuando las 9.000 toneladas de agua
que embarcó en 60 minutos lo tumbaron definitivamente…
giró hacia las profundidades, en un acomodamiento continuado
pero suave… y sin afectar ninguna balsa.

¡Así fue!




La casa es acogedora, muy iluminada y alegre. Te hacían sentir cómodo en ese hogar.

La entrevistadora, fue muy amable desde el comienzo de la entrevista, y contenta por poder recordar nuevamente a su marido que falleció. Muy emocionada por todo lo que estaba contando. Fue hermoso haber hecho esta entrevista, porque te hacen vivir un momento que fue histórico.



Realizada por Karen Tedeschi, estudiante de Periodismo.


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